Qué es la Terapia Cognitiva Post-Racionalista
La Terapia Cognitiva Post-Racionalista fue creada y desarrollada por el psiquiatra italiano Vittorio Guidano, desde los finales de los años 70 hasta agosto de 1999 fecha de su partida.
Esta forma de psicoterapia se funda en el modelo cognitivo constructivista, el cual niega la existencia de una realidad externa definida y unívoca, es decir, igual para todos, y que el orden que muestran los organismos es auto construido, auto organizado. Se plantea entonces que la auto organización es un proceso, es el mecanismo básico de cualquier estructura viviente.
Según Guidano, la historia evolutiva produjo, que en el individuo humano, este elemento básico de la auto organización, la de construir su propio orden experiencial le da constantemente un sentido de coherencia y de continuidad en el tiempo en su interacción con el medio.
Si nos ponemos desde un punto vista ontológico y sobre los fundamentos de la epistemología evolutiva tenemos que clasificarnos como un tipo especial de primates, que nos hace único entre los otros primates y es, por la emergencia del lenguaje.
Esto produjo que la experiencia humana ocurriera entonces en dos niveles y que son simultáneos:
Un primer nivel, que es el nivel de la experiencia inmediata que es un continuo fluir de coordinaciones de sensaciones, emociones y conductas y que no son conscientes.
Luego, simultáneamente el nivel de la explicación, que es explicación de la experiencia inmediata, que puede ser reordenada en conceptos, que pueden ser referidas al sujeto que la está experimentando. El terapeuta desde la primera sesión trabaja en esta interface entre la experiencia y la explicación de la experiencia.
Si nos desplazamos a nivel de la identidad personal al Self (Sí-mismo) podríamos decir que el primer nivel de la experiencia inmediata de uno mismo es una situación específica que se basa en el sentido de continuidad interna, este nivel ocurre de una manera automática siempre sucede como un continuo fluir. Y el nivel de la explicación corresponde a la imagen consciente de sí mismo que una persona se ha construido y que tiene como finalidad la de tener una imagen de sí mismo consistente y continuativa en el tiempo.
Guidano en su modelo distingue dos aspectos fundamentales del Self (Sí-mismo), el primero es lo que él llama la mismidad, que es el sentido de ser continuamente uno mismo, es decir ser siempre la misma persona y que no depende de lo que está ocurriendo momento por momento. Y el otro aspecto es lo que él llama la ipseidad, que en inglés es selfhood que es el sentido de uno mismo que uno tiene mientras están ocurriendo cosas momento por momento, cosas no predecibles, en la cual tenemos un sentido de sí mismo diferente del que se hubiese esperado.
Estas dos categorías se refieren a dos aspectos de la emocionalidad, que son los rasgos emocionales y los episodios emocionales.
Estos dos aspectos son muy importantes en la psicopatología, porque si no hay un sentido de continuidad, de mismidad bien articulado, un episodio emocional, vale decir, una ipseidad, que puede ser suficientemente perturbadora puede no ser reconocida y se puede vivir esta experiencia, como extraña o ajena, se puede vivir entonces como síntomas.
En la terapia el terapeuta trabaja con su paciente en una relación colaborativa, para que el paciente pueda hacer consciente sus emociones que las está viviendo como síntomas, como por ejemplo una depresión.
El terapeuta para hacer este trabajo, conduce al paciente a enfocarse en las emociones que está experimentando, ya sea que estas corresponden a los rasgos emocionales, es decir la mismidad o a los episodios emocionales, la ipseidad, con el fin de reformularle al paciente la problemática emotiva que está viviendo en ese momento en su vida y que no puede reconocer y por lo tanto no puede procesar e integrar en la imagen consciente de sí mismo.
La metodología que se usa es la auto-observación, que sirve tanto para evaluar como también para llevar adelante el proceso terapéutico.
Une vez que el terapeuta ha reformulado la problemática emocional que el paciente está enfrentando, se procede a hacer el contrato terapéutico.
En este enfoque las emociones no se ven como subproductos del pensamiento como en el modelo cognitivo de Beck, si no que se ven como un sistema de información inmediato de uno mismo y del mundo. Para Guidano las emociones son las responsable de mantener el sentido de continuidad de uno mismo.
En este modelo es fundamental entender el lenguaje como una capacidad del ser humano de estructurar la experiencia emotiva en secuencia de escenas en un orden cronológico, causal y temático, separando el contenido informativo de estas experiencias y que son mantenidas en la consciencia como red de historias, que uno se cuenta a sí mismo o a los demás. Esto es lo que se conoce como la estructura narrativa de la experiencia humana.
En la terapia el terapeuta a través de la metodología de la auto observación amplia y enriquece la narrativa del paciente, es decir, aspectos de su experiencia que eran vividos como síntomas, ahora al hacerlos conscientes son reconocidos y por lo tanto procesados e integrados en la historia del paciente.
La terapia es conversacional, pero no es una conversación ordinaria como la que uno mantiene con los amigos, por ejemplo, si no que es una conversación, que se llama de segundo orden, es decir, una conversación donde el terapeuta y paciente se focalizan en el aspectos emotivo, afectivos, emocionales, sensoriales y conductuales del paciente.
La terapia tiene cuatro etapas:
- Evaluación de la problemática. En la que en una relación colaborativa terapeuta y paciente reconstruyen las experiencias del paciente, con el fin que el terapeuta pueda redefinir e internalizar la problemática existencial que el paciente está viviendo, mediante el análisis del desbalance que el paciente ha experimentado en su ciclo de vida.
- Análisis de la experiencia inmediata en el presente que el paciente está viviendo
- Análisis de la experiencia que surge del estado afectivo del paciente y
- Análisis de la historia del desarrollo.